INTRODUCCIÓN
Desde que se detectó la COVID-19 en China 1,2, la enfermedad se ha convertido en una pandemia. En el Perú, la epidemia se inició en marzo del año 2020 y se ha propagado a todo el país: al 16 de marzo de 2021, se han notificado 1 407 963 casos en el país, y 48 414 en La Libertad 3,4. En este departamento, la propagación de la enfermedad ha afectado a la población asegurada: de 18 155 casos, 4122 pacientes fueron hospitalizados y 1511 han fallecido en la fecha indicada 5.
La sintomatología se inicia luego del período de incubación de la enfermedad, que en la mayoría de los casos es de 5 días 6,7. El diagnóstico se hace con criterios epidemiológicos y características clínicas, y se confirma con la prueba de reacción en cadena de la polimerasa 8. La mayoría de las infecciones se autolimitan, pero los cuadros más graves ocurren en personas mayores de 60 años o con enfermedades subyacentes 9, y requerirán hospitalización.
En el país, los casos se han clasificado en leves, moderados y graves 10. Los casos moderados deben recibir el tratamiento en un hospital con las condiciones adecuadas para el aislamiento. En los casos graves o críticos, la enfermedad progresa rápidamente con disfunción o incluso falla de más de dos órganos, lo que pone en peligro la vida del paciente, por lo que debe ser admitido en una unidad de cuidados intensivos (UCI) lo antes posible 8,10,11,12,13.
En el curso de la epidemia de COVID-19, es importante conocer la información de las hospitalizaciones por esta enfermedad, tanto las características de los pacientes como el uso de los servicios, para mejorar la planificación e implementar estrategias de prevención en la comunidad y optimizar la atención de los pacientes. Por ello, el objetivo de esta investigación es describir a los pacientes hospitalizados (edad, sexo y comorbilidades), los servicios hospitalarios, la estancia hospitalaria, los pacientes internados en la unidad de cuidados intensivos (con ventilación mecánica), los fallecidos y los pacientes que salieron de alta.
MATERIALES Y MÉTODOS
Diseño y población de estudio:
Estudio descriptivo desarrollado en la red asistencial La Libertad de EsSalud, ubicada en el departamento del mismo nombre, que cuenta con 555 camas de hospitalización distribuidas en 12 establecimientos de salud. Los datos de los pacientes se recolectaron de las fichas clínico-epidemiológicas de los pacientes con COVID-19 y de la revisión de historias clínicas. La confidencialidad y el anonimato de las personas fueron respetados. Se denominó hospitalizado a la persona que permaneció en un centro de salud al menos 24 horas y con enfermedad confirmada por prueba de laboratorio, reacción en cadena a la polimerasa en tiempo real o prueba rápida, entre el 15 de marzo y el 17 de agosto del 2020. Las comorbilidades se seleccionaron de acuerdo con estudios previos. Las enfermedades cardiovasculares incluyeron cardiopatía coronaria, insuficiencia cardíaca, arritmias, valvulopatías y arteriopatía periférica 14,15.
RESULTADOS
Se incluyeron 2093 hospitalizados con COVID-19. La mayoría de los pacientes tenía de 50 años a más (Figura 1), el promedio de edad fue 58 años (rango de 2 a 98 años) y el 63,21 % eran hombres.
Figura 1 Distribución de los pacientes hospitalizados con COVID-19 por grupo etario, del 15 de marzo al 17 de agosto del 2020
El 39,99 % de los pacientes tenían comorbilidades. La hipertensión arterial se documentó en el 16,24 % y fue la más común en las personas de 65 años a más (p = 0,000); el 11,90 % sufría de diabetes mellitus, sobre todo en el grupo ya mencionado (p = 0,000). La obesidad se presentó en el 7,02 %, con mayor frecuencia en el grupo de 18 a 49 años (p = 0,000). El 1,9 % tenía enfermedad cardiovascular, mientras que el cáncer, asma, enfermedad renal crónica, cirrosis y tabaquismo aparecieron en menos del 1,10 % de los pacientes (Tabla 1).
Tabla 1 Asociación entre el sexo y el destino final de los pacientes atendidos por COVID-19 en el Servicio de Emergencia en el HMC
La media o promedio de la duración de la hospitalización fue 8,02 días. El grupo de 50 a 64 años tuvo el mayor promedio (p = 0,000). De los 205 pacientes (9,79 %) que ingresaron a la UCI, el grupo más numeroso fue el de 50 a 64 años (p = 0,000); la media del tiempo que un paciente estuvo en UCI fue de 20,40 días; y los menores de 18 años estuvieron más tiempo (p = 0,000). Doscientos pacientes (9,56 %) requirieron ventilación mecánica, no hubo diferencia significativa entre los grupos etarios (p = 0,942). Los pacientes estuvieron en ventilación mecánica un promedio de 15,26 días; los menores de 18 años mostraron el mayor promedio (p = 0,000).
Los pacientes que murieron fueron 843 (40,28 %) y la mayoría tenía de 65 años a más (p = 0,000). El 5,21 % (109 pacientes) de quienes recibieron ventilación mecánica fallecieron, el 54,50 % de todos los pacientes con este procedimiento, sin diferencias significativas entre los grupos de edad (p = 0,191). Los pacientes que salieron de alta fueron 1041 (49,74 %), la mayoría estaba en el grupo etario de 18 a 49 años (p = 0,000). En el momento en que se recolectaron los datos, 209 pacientes (9,99 %) continuaban hospitalizados al momento que se recolectaron los datos (Tabla 2).
DISCUSIÓN
Al analizar la información de los pacientes hospitalizados por COVID-19, encontramos que la mayoría tuvieron más de 50 años, con predominio de 65 años a más, lo que concuerda con varios estudios 14,15,16,17. La edad media fue 58 años, lo que difiere de otras investigaciones que mostraron un promedio menor 18, asimismo se reporta una edad mayor 19,20,21,22, lo que muestra que las personas de 65 a más años tienen un riesgo mayor de sufrir una enfermedad grave, por lo que aumentaría la probabilidad de ser hospitalizadas 14,15.
De todos los pacientes, los hombres formaban el grupo más numeroso, dato que coincide con otras investigaciones 16,17,18,19,23,24, aunque difiere a una serie en la que predominaban las mujeres 21.
Respecto a las comorbilidades, el 39,99 % de los pacientes las presentaba, lo que coincide con un reporte 15, pero difiere de otros estudios que muestran comorbilidades en más del 50 % de los pacientes 14,17,22,23,24 (en el rango de 61 % a 89 %).
La hipertensión arterial, la diabetes mellitus y la obesidad son las principales comorbilidades de nuestra población, tal como ocurrió en otros trabajos 15,16,19,22,25 . Las dos primeras se presentan también en otras investigaciones en las que se relacionan con una mayor gravedad 14,15,18,19,24,26. Algunos autores no consideran que la obesidad puede agravar los casos de COVID-19 14,15, aunque un estudio reciente ha determinado que la obesidad sí está relacionada con la severidad del cuadro 27. Asimismo, se refiere que los grupos minoritarios raciales y étnicos tienen un riesgo más alto de tener enfermedad grave por COVID-19, ya que la prevalencia de dolencias previas es mayor en ellos 16.
En los pacientes de más de 65 años, la comorbilidad más frecuente fue la hipertensión arterial seguida de la diabetes mellitus, al igual que en estudios anteriores 16,22. La obesidad se observó en las personas de 18 a 49 años, al igual que en un informe previo 16. En esta investigación, la frecuencia de enfermedad cardiovascular, asma, cáncer, enfermedad renal crónica, cirrosis hepática y tabaquismo fue menor del 1,10 %; sin embargo, en Inglaterra, la enfermedad cardiovascular apareció en el 31 % de los casos y la enfermedad renal crónica, en el 16 % 23.
Las características de los grupos de edad, el sexo y las comorbilidades descritas en los pacientes con COVID-19 pueden estar relacionadas con la prevalencia de las enfermedades, tal como se menciona en algunos reportes 14,28.
La media de la duración de hospitalización fue 8,02 días, tiempo que es menor al de un estudio que refiere un periodo de 10,40 días 22. El 9,79 % de los pacientes internados fueron atendidos en la Unidad de Cuidados Intensivos; en distintas series, este tipo de atención varía de 3,40 % al 24 % 15,19,21,23; la mayor cantidad de pacientes estaban en el grupo de 50 a 64 años, y en otros estudios, en el grupo de 65 años a más 16.
La mortalidad fue 40,28 %, similar a lo reportado 20, aunque es alta respecto a otros estudios 16,21,22,23 en los que la mortalidad fue del 17 % al 26 %; la mayoría de las muertes ocurrió en los pacientes de 65 años a más, similar a una investigación europea 21. El 54,50 % (109/200) de los pacientes que recibieron ventilación mecánica fallecieron, sin diferencias significativas entre los grupos de edad, este resultado es alto respecto a otras publicaciones 16,17, pero menor que una serie de casos de China 18. Aproximadamente, la mitad de los pacientes fueron dados de alta, lo que coincide con un estudio previo 23.
Esta investigación, al ser retrospectiva, tiene como limitaciones que los datos provienen de una muestra censal y que los pacientes no fueron seguidos desde que fueron hospitalizados, pues la información empleada estaba registrada en una base de datos.
De los resultados obtenidos, recomendamos mejorar el manejo de las comorbilidades e implementar el seguimiento clínico para disminuir las hospitalizaciones y continuar promoviendo las medidas que disminuyen la propagación de la infección, por ejemplo, quedarse en casa, usar las mascarillas, el distanciamiento social, la ventilación del ambiente e higiene de manos, para proteger a los grupos considerados de riesgo, así como a los que no tienen tal condición 16,17,26,29,30