Sr. Editor: Después de haber leído el artículo de Guevara et al., donde se efectuó un interesante análisis sobre la fisiopatología entre la falta de hemoglobina y la causa de la insuficiencia cardiaca (IC), se menciona que a pesar de los numerosos estudios realizados acerca de la influencia de la anemia sobre la IC en la morbilidad y mortalidad, no existía un consenso sobre el valor pronóstico de esta enfermedad sobre la IC ¹; sin embargo, existen numerosos estudios sobre el valor pronóstico de influencia de la anemia sobre la IC, con los cuales nos gustaría complementar al respecto.

En el estudio desarrollado por Bichara et al. se demostró que existe el riesgo de muerte por insuficiencia cardiaca crónica (ICC) en pacientes anémicos, específicamente en pacientes con IC sistólica, con un ascenso del 3 % de muerte relacionada con el hematocrito; sin embargo, queda la incertidumbre de si la relación entre estos dos cuadros patológicos es causal o solo un factor de riesgo. Cabe mencionar que, en pacientes anémicos, un valor de Hb <13 g/dl es un vaticinador directo de IC y puede acarrear múltiples factores fisiopatológicos, entre ellos y el más importante, el transporte de oxígeno dirigido a los órganos blancos, entre ellos el corazón o el riñón, relacionados furtivamente con la insuficiencia renal, por tanto, empeora el cuadro clínico en pacientes hospitalizados. A ello se suman los factores secundarios como la fracción de eyección y la enfermedad renal crónica (ERC), considerado un indicador sinuoso de IC que da como resultado un peor pronóstico ².

Además, García et al. realizaron un estudio para poder analizar la etiología de la anemia en la IC, sobre todo para analizar la importancia del valor pronóstico de la anemia sobre la IC. Se analizó un grupo de historias clínicas de 272 pacientes que tenían Hb < 12 g/dL y se determinó que un 39,9 % de los enfermos que ingresaban por IC tenían anemia. También se observó que esto podía estar relacionado con el adulto mayor a partir de los 82,1 ± 9 años, y otros múltiples factores como la cardiopatía isquémica (15 %), la cardiopatía hipertensiva (34 %), la valvulopatía (14 %) y los reingresos hospitalarios. Sin embargo, en estudios concurrentes se anexa a los pacientes con IC y la anemia con respecto a la capacidad de la eritropoyetina en la ERC, donde su pronóstico de mortalidad es del 15 % ³.

Por otro lado, Sánchez et al., en su estudio, manifestaron que la anemia se asoció a tasas altas de mortalidad cardiaca, sobre todo en pacientes de sexo femenino (65,7 %) y de mayor edad (74 ± 2 años). Estudios observacionales y un análisis multivariable revelaron la presencia de anemia como una condición de peor pronóstico para los pacientes con IC. La anemia se manifestó como un factor predictor de mortalidad (19,89/100), donde por cada disminución de Hb en gramos aumenta el riesgo de muerte hasta en un 20,5 % ⁴.

En conclusión, es posible afirmar que existe un valor pronóstico de mortalidad para pacientes con anemia que cursan con IC; en los estudios analizados se determinó que esta mortalidad es superior al 3 % y está relacionada con el nivel de anemia de los pacientes, por lo cual es posible afirmar que existen factores pronósticos como morbilidad y mortalidad de IC en estos casos. Asimismo, se deberían considerar otros factores como la edad, así como otras comorbilidades que podrían constituir sesgos en el análisis bivariado de esta relación pronóstica.